lunes, 28 de octubre de 2013

Memòria personal



«...En cambio, para la pintura contemporánea, muy pronto me pareció que mi padre no tenía ningún gusto. Mejor dicho, tenía un mal gusto horroroso. No entendió nunca la pintura del siglo XX y todavía menos la que posteriormente hice yo, y esto último fue motivo de grandes disgustos. Cuando yo ya comenzaba a hacer algún cuadro me dijo un día -definiendo bastante bien sus ideales-: "Escucha, en lugar de pintar esas tonterías tan poco serias vamos a ver si serías capaz de hacerme un tema humano como el siguiente: un grupo de niños con caritas angelicales, que miran un teatro de marionetas, y su padre, que desde el escenario mueve los muñecos y asoma la cabeza por un lado para contemplar las reacciones de sus hijos queridos."»

ANTONI TÀPIES, "Memòria personal". Ed. Crítica (Barcelona 1977) Página 94.








3 comentarios:

enrique dijo...

¿No consta que el pintor fuera capaz de pintar el desafío lanzado por su padre?

Alfaraz dijo...

Consta que se negó en redondo. Para romper con la academia lo primero es desobedecer al padre.







.

ONDA dijo...

Yo aun no comprendo muy bien su pintura pero desde luego que es un genio...
Si en ocasiones cuando el convencimiento es pleno en ocasiones hay que hacerlo.
Yo tengo que reconocer que en casi todo y en mi oficio sobre todo el siempre tenia razón.

Un fuerte abrazo y FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO 2014 PLENO DE ARTE.-